La Comisión Europea ha adoptado hoy el ''Libro Verde'' con el que pretende recoger información sobre cómo ayudar a los agricultores europeos a aprovechar los puntos fuertes de sus producciones e informar mejor a los consumidores sobre los productos a la venta.
Entiende que la ''calidad'' es el arma más potente de los productos europeos, pero no siempre el consumidor conoce los beneficios. ''Quizá lo más importante sea comunicarlo de manera efectiva'', ha defendido la comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel.
En este sentido, defiende que ofrecer a los consumidores ''lo que desean exactamente, distinguiendo claramente sus productos y ganando primas a cambio'' permitirá hacer frente a las importaciones de terceros, que ponen en peligro la competitividad de nuestros productos, al contar con menores costes de producción.
El Libro Verde plantea cuestiones referentes al etiquetado, a la comercialización de productos que no cumplan con las normas por razones estéticas, perfeccionar el sistema de IGP y cómo protegerlas más eficazmente, etc.
La consulta durará hasta finales de 2008 y permitirá elaborar una comunicación con sus conclusiones, de las que previsiblemente saldrán algunas propuestas legislativas.
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