Consumir aceite de oliva retrasa la aparición de enfermedades crónicas y aumenta la calidad de vida en la vejez, gracias a sus propiedades antioxidantes y micronutrientes y por su riqueza en grasa monoinsaturada.
Así lo ha explicado el doctor Francisco Pérez, quien ha hecho referencia a varios estudios sobre este tema que serán presentados en el II Congreso Internacional sobre Aceite de Oliva y Salud que se celebrará la próxima semana en Córdoba.
Según recoge la Confederación de Cooperativas Agrarias de España, el aceite de oliva, a diferencia de otros, previene el envejecimiento gracias a sus grasas monoinsaturadas que ejercen efectos más positivos sobre la salud.
Además, como parte de la dieta mediterránea ''favorece la longevidad'' ya que ayuda a reducir los mecanismos que favorecen el desarrollo de enfermedades crónicas.
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