A casi dos meses de que el secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno presionara a los supermercadistas para éstos adquieran gran parte del sobrestock de quesos que tienen las Pymes lácteas, sólo lograron venderse poco menos de 600 toneladas de las 2500 que las empresas tienen en cámara.
El plan de Moreno tuvo un doble fracaso. Por un lado los supermerados no compraron la cantidad que el secretario quería y, por otro, los que sí compraron (algunas grandes cadenas de supermercados) lo hicieron a precios que no superan los 8,00 $/kg para el queso tipo cremoso, cuando los propietarios de las Pymes reclamban al menos 10,0 $/kg para poder pagar una cifra cercana a 1,00 $/litro a los productores.
Las operaciones fueron pactadas principalmente por Pymes de Córdoba y de Buenos Aires, ya que las empresarios lácteos de Santa Fe se mostraron reticente desde un principio a llegar a un acuerdo no satisfactorio con los supermercadistas.
Los empresarios del sector Pyme aseguran que vendiendo a un valor de 8,00 $/kg el cremoso no pueden pagar más de 0,75 $/kg a los productores.
En este escenario Moreno volvió a convocar de manera urgente para el próximo jueves a la dirigencia de la Asociaciones de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas de Santa Fe (Apymel), a quienes trasladará el reclamo de los productores que presionan por cobrar más por el precio de la leche.
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