Un grupo de investigadores brasileños desarrolló una variedad de leche de cabra que hipotéticamente, por haber sido enriquecida con Acido Linoleico Conjugado (CLA, por sus siglas en inglés), tiene efectos benéficos sobre la salud, como la reducción del colesterol y la regulación del apetito.
La leche enriquecida con CLA fue desarrollada por investigadores de la división para el estudio de Cabras y Ovejas de la estatal Empresa Brasileña de Pesquisa Agropecuaria (Embrapa), informó hoy esta entidad en su página en internet.
Las investigaciones ya han demostrado que este ácido graso esencial, producido naturalmente por rumiantes, puede ayudar a reducir los índices de colesterol y de glucosa en la sangre.
El CLA (Conjugated Linoleic Acid) es un nutriente natural encontrado en diversos alimentos, como carne bovina, pavo y algunos lácteos, preciado por los atletas debido a que supuestamente convierte la gordura en músculos.
La Embrapa consiguió aumentar el contenido de CLA en la leche de cabra mediante modificaciones en la dieta de los animales. Con una alimentación rica en aceite de soja y hojas verdes, la leche de los caprinos gana el nutriente con sus características funcionales.
Según el investigador Marco Bomfin, responsable por el proyecto, la próxima fase de la investigación es determinar si las alegadas ventajas del CLA tienen efectos funcionales entre quienes beben la leche.
Para ello, investigadores en nutrición y biomedicina de las universidades federales de Pernambuco y Paraíba, y de la Universidad del Estado de Río de Janeiro (UERJ), probarán la leche enriquecida en ratones.
El producto será suministrado a un grupo de ratones normales y a otro grupo con índices elevados de colesterol y glucosa en la sangre.
''Los resultados podrán indicar en qué medida el enriquecimiento de la leche con CLA puede contribuir para mejorar la dieta de la población'', según Bonfim.
Luego de que las investigaciones iniciales verificaran un aumento del contenido de CLA en la leche producida por las cabras sometidas a la dieta especial, ese incremento será cuantificado por Caprilat, una empresa del estado de Río de Janeiro dedicada a la producción de leche de cabra.
Bonfim integra el Proyecto de Alimentos Funcionales de la Embrapa, que reúne a diferentes investigadores de la estatal que trabajan con sustancias antioxidantes en las frutas, fibras contenidas en las verduras y ácidos grasos extraídos de semillas, leche y peces.
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