Alimentos respetuosos con el medio ambiente, sin químicos y 100% gallegos. Éstos son los ingredientes de los menús ecológicos que ya han probado 3.500 alumnos de Galicia y que el Consello Regulador de Agricultura Ecolóxica (Craega) -organismo dependiente de la Consellería de Medio Rural- promueve por toda la comunidad con el fin de que cada vez más comedores escolares se animen a ofrecer productos saludables a los pequeños.
Bajo el lema de Comer San= Eco-lóxico, este organismo lleva dos años incorporando productos ecológicos a la dieta de cientos de gallegos que cada día se ven obligados a comer fuera de casa. El objetivo es que los más pequeños -que comen una media de 165 días al año en los colegios- tengan una alimentación más sana ya que ''está comprobado que los niños que ingieren durante años alimentos ecológicos se recuperan mejor de las enfermedades y sufren menos catarros'', señalan desde Craega.
Los beneficios son claros, pero los colegios que apuestan por los menús ecológicos son todavía una minoría. Desde 2006, sólo diez centros participaron en esta campaña, cifra que la Xunta espera aumentar este año. La nueva edición, que comenzará a mediados del próximo mes de enero, está abierta a 244 centros escolares de toda la comunidad. ''Quienes estén interesados deben ponerse en contacto con nosotros. Por el momento, ya han llamado una docena de colegios pero recibimos peticiones todas las semanas. Esperamos llevar los menús ecológicos a unos 50 centros'', indican fuentes de Craega.
Vistos desde fuera, los menús ecológicos de la Xunta -que los escolares prueban como mínimo durante una semana- apenas se diferencian de los platos tradicionales. Sin embargo, la crema de champiñones, los huevos, garbanzos, ternera con patatas, macarrones con tomate, arroz, lentejas o incluso yogures que presiden las mesas de los colegios son productos sin ningún tipo de componente químico y cuyo cultivo se ha realizado respetando el entorno y la fertilización del suelo. Alimentos sanos y de la tierra. ''Aproximadamente el 90% de los artículos que conforman estos menús son gallegos. Sólo recurrimos a productos de fuera cuando aquí no se producen, como ocurre con la pasta'', informa Craega.
Pero la campaña Eco-lóxico no sólo consiste en que los estudiantes gallegos conozcan de primera mano los alimentos ecológicos una vez pasan por el comedor. Para quienes regresan a sus casas todos los mediodías, el Consello Regulador da Agricultura Ecolóxica de Galicia celebra charlas y talleres especializados en los que se intenta fomentar la educación alimentaria, mejorar la salud de los pequeños e impulsar el desarrollo rural y el cuidado del medio ambiente. Para impartirlas y llamar la atención de los estudiantes de Educación Infantil y Primaria nada mejor que contar con una mascota propia: Zenoria, que se encarga de responder a todas las preguntas sobre agricultura ecológica que formulen los niños.
Por el momento, la provincia de Lugo es la que ha demostrado más interés en incorporar la dieta ecológica a sus estudiantes. Desde 2006, cuatro centros lucenses participaron en este programa: el Doctor López Suárez de Escarón y el Río Cobe, A Gándara y los Escolapios de Monforte. Tras Lugo, Ourense es la provincia con más participantes (Antonio Failde Cambeo, San Marcos de Cartelle y el Calvo Sotelo de O Carballiño) mientras que sólo dos colegios de A Coruña y Pontevedra probaron estos menús (Colexiata Sar de Santiago y Abrente de Portonovo).
Concienciar a los niños es el primer paso pero los padres tienen mucho que decir. Por ello, los colegios elaboran recetarios y folletos informativos dirigidos a las familias con un único objetivo: que los artículos ecológicos pasen a ser habituales en las mesas gallegas.
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