Más de un centenar de ganaderos de la provincia se concentraron ayer en la sede de APAG Guadalajara para expresar su malestar ante la grave crisis que está atravesando el sector . Entre los presentes, se apreciaban sensaciones de indignación e incertidumbre ante la pasividad de las administraciones a la hora de poner en marcha medidas urgentes y efectivas que frenen la situación actual.
Todos los asistentes coincidían en que como no se actúe con rotundidad y rapidez, las consecuencias pueden ser irreparables en un breve plazo de tiempo.
En esta reunión con los ganaderos desde APAG se les ha dado cuenta de las últimas reuniones que se han producido con las administraciones nacional y regional y de las que, la única conclusión que se ha sacado, es que ambos gobiernos han obviado todas las propuestas planteadas desde las organizaciones ganaderas.
De las iniciativas presentadas la administración regional sólo ha adoptado una que es la concesión de una ayuda mediante préstamos subvencionados, algo que para APAG, es ''a todas luces insuficiente''.
Los ganaderos han dejado patente hoy su profunda preocupación por el abandono que padecen por parte de ambos gobiernos: el nacional y el autonómico. Uno de los asuntos que más les indignan es la falta de consideración ante los continuos ataques que sus ganados están sufriendo de otros animales. Para los presentes, las administraciones protegen más a los buitres y lobos que a los ganaderos.
Sobre este asunto, incluso uno de los asistentes relató con desolación y nerviosismo como sus hijos también han sido acosados por los buitres que se encuentran en situación de hambruna. Por lo que, expresó que teme por la integridad de sus pequeños ante un posible ataque de un animal desesperado.
En este sentido, los asistentes también criticaron y rechazaron las últimas declaraciones efectuadas por el delegado provincial de Medio Ambiente, Sergio David González, en las que manifestó que los ganaderos debían reforzar las medidas de precaución a la hora de resguardar el ganado para evitar estos incidentes. Una medida, imposible de adoptar en algunas zonas donde la ganadería es extensiva. Estas manifestaciones del delegado, arrojan para los ganaderos una ignorancia explícita de cómo realizan su trabajo.
Pero la crisis que afecta a los ganaderos no sólo se produce por los animales que pierden en los ataques, los profesionales del sector ven como venden sus productos al mismo precio que hace treinta años.
El beneficio por su trabajo cada año se ha ido recortado, hasta llegar a la situación actual en la que es prácticamente inexistente. A la falta de beneficios económicos hay que sumar el incremento de sus costes: por un lado, la subida de los piensos en 100% en un año, y por otro, el aumento en los gastos por el personal que trabaja en las explotaciones.
Ante esta situación que se está viviendo en el sector y por la que ya se están produciendo manifestaciones en las últimas semanas en el territorio nacional (hoy mismo ante el Ministerio de Agricultura), APAG a través de ASAJA Castilla La-Mancha anuncia movilizaciones para el mes de mayo.
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