La organización indicó que los ciudadanos deben confiar en los mecanismos establecidos de seguridad alimentaria, de forma que los consumidores deben de fiarse de los alimentos de origen cárnico y muy especialmente del vacuno español.
Según recordó la organización agraria, tras los primeros casos de esta enfermedad en España, se puso en marcha un protocolo de actuaciones y controles sanitarios, que garantizan ''completamente'' que los priones, partículas enfermas, que originan la enfermedad ''nunca accedan a la cadena alimentaria humana, de esta forma la trazabilidad y por consiguiente la calidad de los productos cárnicos está asegurada desde la explotación del ganadero hasta los puntos de venta a los consumidores''.
En relación a los ''lamentables fallecimientos'' acontecidos, Apag resaltó que se tratan de personas infectadas hace varios años cuando los controles frente a esta enfermedad eran menores, siendo actualmente ''totalmente imposible'' que la variante Encefalopatía Espongiforme Bovina pueda afectar al humano a través de la cadena alimenticia.
Por ello, la organización agraria pidió nuevamente a los consumidores la ''plena confianza en el sector cárnico español, ya que está totalmente garantizada su calidad desde el punto de vista sanitario''.
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