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Horas después de una dura reunión con la dirigencia de las cuatro entidades, el titular de Coninagro y el presidente de la cooperativa láctea se reunieron con Cristina K. Las bases de la gremial del campo acusaron al dirigente de afectar la posición de fuerza. Por qué la segunda empresa láctea del país, propiedad de 1.600 tamberos, está a merced del Gobierno.

En las rutas. Los tamberos de SanCor están agrupados en Coninagro, militante del paro a pesar del voto de la compañía en la gremial empresaria.

SanCor es para el Gobierno como el alumno becado del colegio: se le da una mano en los problemas financieros. Pero no se le permite que patee el portón ni que se le retobe a la maestra. Esa dependencia financiera convierte a la láctea, la segunda del país, en una ficha estratégica del Gobierno para debilitar la unidad del campo, que amenaza con volver a tomar medidas de fuerza a partir del viernes próximo si el resultado de la tregua no termina de conformar a las bases chacareras.

Esto quedó demostrado el lunes pasado, cuando Cristina K mandó a llamar con urgencia al presidente de SanCor, Oscar Carreras, junto al titular de Coninagro, Fernando Gioino, alegando que la presencia del dirigente sería importante, teniendo en cuenta que es un productor, precisamente, de SanCor... Y así fue.

El problema es que Gioino es también ''importante'' para el frente de las entidades agropecuarias que lideran la mayor protesta agropecuaria de la historia argentina.

La convocatoria llegó por teléfono el lunes a la tarde, luego de una reunión entre los productores lácteos y el secretario de Agricultura, Javier de Urquiza, en la que los tamberos habían presentado un documento reclamando cambios en el acuerdo lácteo firmado por los privados y el gobierno el 28 de diciembre de 2007. Lo que se pidió fue una mejora en el precio de la materia prima y en el valor de la tonelada de leche en polvo de exportación. Y solicitaron que se redujera a cinco la lista de 16 productos lácteos con precio congelado.

Para quebrar al frente lácteo, Cristina le pidió a Carreras y a Gioino que ratifiquen el acuerdo de diciembre. Es decir, que confirmen el pacto lácteo en su totalidad, ignorando los pedidos de revisión presentados por los representantes de la mesa láctea 24 horas antes. Y SanCor dio el mal paso y lo ratificó, según admitió a PERFIL el gerente de asuntos institucionales de la cooperativa, Sergio Montiel.

El directivo señaló que en el encuentro no recibieron ningún tipo de presión ni condicionamiento. Y agregó que la reunión estaba prevista para informarle al Gobierno datos alentadores del negocio, como los resultados obtenidos en el último semestre del 2007. Pero en el encuentro les informaron que estaba pronto a acreditarse un nuevo desembolso de la esperada asistencia de Venezuela.

Y ellos pusieron al tanto a Cristina K acerca de proyectos de negocios destinados a fabricar insumos para la alimentación, con valor agregado, a partir de subproductos lácteos.

También le ratificaron que SanCor considera que el mejor camino para superar las diferencias del campo con el Gobierno es el diálogo.

Las declaraciones fueron música en los oídos de Cristina. Pero generaron un ruido atronador en las bases tamberas, militantes de Coninagro, que interpretaron que SanCor había ''sacado los pies del plato'', y ''se cortó sola''.

No obstante, varios productores reconocieron ante PERFIL que era ''esperable'' esa conducta de SanCor, ''porque depende de las exportaciones y de las compensaciones de la ONCCA''. Pero no perdonaron que Gioino los hubiera acompañado.

Desde SanCor, en cambio, consideraron que el dirigente estuvo allí porque integra la empresa y está al frente de Coninagro por mandato de la cooperativa.

El rol desestabilizador del Gobierno en SanCor y en la interna agropecuaria es fruto de la dependencia financiera de la cooperativa: 1) Con una deuda refinanciada de US$ 135 millones, logró evitar ser vendida a Adecoagra, participada por George Soros, gracias a un operativo de salvataje gestionado durante el gobierno de Néstor Kirchner ante el venezolano Hugo Chávez, quien ofreció US$ 80 millones a cambio de leche en polvo y transferencia de tecnología; la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA) otorga compensaciones de cinco centavos de peso por cada litro de leche producido y destinado al mercado interno. SanCor, junto a Mastellone, acaparan más del 70% de esas partidas.

Sólo entre enero y septiembre del 2007 SanCor recibió $ 65 M. Las partidas del último trimestre ya fueron aprobadas por resolución, pero no se acreditaron las partidas. Para este año, el Gobierno prometió a SanCor alrededor de $ 60 millones en materia de compensaciones.

Estos fondos no sólo oxigenan el día a día de la cooperativa láctea. Sino que además actúan de póliza para que el Gobierno genere grietas internas entre los chacareros cuando la coyuntura les exige estar más unidos que nunca.

Números cooperativos

- Accionistas. SanCor es una cooperativa de 1.600 tamberos de Córdoba y Santa Fe.

- Utilidades. $ 6,2 millones en el balance del 2007.

- Patrimonio neto. Es negativo, por $ 127 millones.

- Deuda.US$167 millones, refinanciados, más US$ 40 millones asumidos post refinanciación.

- Acuerdo con Venezuela. A través del Bandes prestó US$ 80 millones a cambio de 248.000 toneladas de leche en polvo hasta el 2019 y de transferencia de tecnología. Habrá otro tramo de US$ 40 millones de capital, cuyo otorgamiento dependerá del cumplimiento de otros acuerdos entre las partes.

- Principales acreedores. El banco holandés Rabbobank, la Corporación Financiera Internacional y el Banco Nación.

- Plazos y tasas. Refinanció a 15 años con una tasa de 3% anual.

- Compensaciones del ONCCA por ventas internas. En 2007 recibió $ 75 millones. Falta acreditar el último trimestre, y alcanzarían $ 95 millones.

- Compensaciones previstas para 2008. $ 60 millones.

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