Medio centenar de personalidades de la región impulsan Andalucía Sostenible, un foro de debate que aportará soluciones y respuestas a la aparente incompatibilidad entre desarrollo y medio ambiente.
El modelo imperante de desarrollo acabará por asfixiar al planeta. Contra la resignación de ese augurio, en el que coinciden casi todos los organismos nacionales e internacionales, nació en noviembre pasado Andalucía Sostenible, un foro de ideas impulsado por casi medio centenar de personalidades de la comunidad -en su mayoría del mundo empresarial y académico- y presentado anoche, de forma oficial, en los Reales Alcázares de Sevilla ante 300 invitados en un acto presidido por el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín.
Investigación y observación; reflexión y debate; formación y difusión. Tres grandes objetivos que según el presidente de la asociación, Juan Manuel Sanz (también presidente de Dolmen, inmobiliaria especializada en la promoción de VPO), pretenden canalizar y dar respuesta a ''la inquietud de la sociedad andaluza ante las nefastas consecuencias del cambio climático''. En definitiva, buscar recetas para evitar que, como coincidió Francisco Mesonero (portavoz del foro y director general de la Fundación Adecco), efectos perniciosos como la desertización, la degradación del litoral por efecto de una construcción sin freno o el envejecimiento de la población comprometan el futuro de las generaciones que quedan por llegar.
Sobran los ejemplos, y las alarmas. Sanz recordó ayer que Andalucía, por su particular enclave geográfico, puede sufrir en las próximas décadas el efecto de los flujos migratorios o el devastador legado de la sequía. El presidente de Dolmen también definió a la región como víctima de un desarrollo urbanístico ''desordenado, frágil y preocupante''. Frente a ese desalentador panorama, el foro de debate recién creado apuesta por potenciar las energías renovables, crear canales eficaces de distribución para la producción ecológica (la región ejerce el liderazgo nacional), respaldar al desatendido medio rural , fomentar el consumo responsable, respaldar un modelo de construcción sostenible o imponer el uso del transporte público sobre el privado.
Esa labor de estudio y debate recaerá sobre comisiones de trabajo que analizarán las amenazas que planean sobre Andalucía. Las conclusiones se difundirán en foros y eventos, y se extenderán a actividades de formación, publicaciones y alianzas con entidades.
Andalucía Sostenible, sin adscripción política ni ánimo de lucro, se apoya en sus primeros 47 asociados, pero está abierta a más incorporaciones. La financiación corre a cargo de ''personas y empresas'', pero siempre que ''el dinero no ponga condiciones''. Y una recomendación: que los empresarios, ''consecuentes'', apliquen las recomendaciones del foro.
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