La consumidores canadienses prefieren vinos tintos frutales ante los vinos con aromas y sabores a madera, optando por vinos tintos con aromas y sabores a berries y un cierto dulzor. Así lo constató un estudio entre consumidores habituales de vinos de Toronto, realizado por Vinnova, consorcio tecnológico empresarial para la vid y el vino.
Los resultados del estudio Wine Consumer Preferences II realizado por Vinnova junto al Centro de Aromas de la PUC Chile y la empresa canadiense Compusense, fueron dados a conocer en seminario realizado el 24 de junio en el hotel Ritz Carlton de Santiago.
En la ocasión, se dieron a conocer los principales resultados del estudio realizado entre 629 consumidores de las tiendas LCBO de Toronto que degustaron en total 12 vinos tintos con precios de venta retail entre 10 y 20 dólares canadienses, siendo cuatro de Chile, tres de Australia, dos de Argentina, dos de EEUU y uno de Sudáfrica.
La mayoría de los consumidores que participaron en la degustación de esos vinos manifestó preferencia por vinos frutales, con presencia de aromas y sabores a berries, dulzor y pasas. En gran parte manifestaron rechazo a vinos de marcada astringencia, madera, pimentón, amargor y cuero.
Los cuatro vinos chilenos degustados, cuyos nombres no fueron dados a conocer, registraron en su conjunto, según los participantes en el estudio, marcada astringencia y amargor, y bajo contenido de berries, pasas y violeta.
En ese sentido, los vinos australianos, los que fueron de la preferencia de los consumidores participantes, registraron marcada presencia de berries, pasas y dulzor. Los vinos chilenos fueron los segundos en la preferencia de los consumidores de este estudio que se realizó en cinco tiendas LCBO entre el 23 de octubre y 5 de noviembre de 2007.
Comentando los resultados del estudio, Eduardo Agosín, director del proyecto y del Centro de Aromas de la PUC, destacó que los productores de vinos chilenos del nivel de precios que se analizaron, deberían buscar reducir los niveles de astringencia muy alta, pues eso es rechazado por los consumidores, aunque destacó que el rechazo es de astringencia muy alta, pero no ausencia total de la misma, más bien gustan de niveles medianos, de taninos suaves.
Otro elemento destacado por Agosín fue la necesidad de que las viñas chilenas busquen elaborar vinos más frutales y con menos presencia de roble, cuero y herbáceos. Para tal manifestó que a nivel enológico se podría buscar incrementar los elementos frutales, y para moderar la astringencia sugirió el manejo de los taninos (suavidad) con el desarrollo de métodos rápidos de medición.
Otras informaciones recogidas por el estudio fueron dadas a conocer por Gerard Casaubon, jefe de la Unidad de Estudios Sensoriales y Hedónicos del Centro de Aromas de la PUC.
Respecto del tipo de cierre de las botellas, un 44,8% prefiere vinos con tapón natural, 35,4% se mostró indiferente, un 9,3% se refirió a tapones sintéticos, y 10,5% a tapa rosca o screwcap.
Consultados sobre la facilidad de uso de los tapones, 54,1% señaló tapa rosca, 18,7% tapón natural, 9,3% tapón sintético, y 18% se mostró indiferente.
Asimismo, un 67% manifestó preferir vinos en botellas de vidrio, y cerca de 40% prefiere etiquetas elegantes y clásicas.
La gerente general de Vinnova, Elena Carretero, señaló que el objetivo general del proyecto es desarrollar una metodología científica basada en técnicas objetivas de análisis químico, sensorial y hedónico que permita identificar los estilos de vinos preferidos por los consumidores de los distintos mercados de exportación y sus respectivos segmentos.
Vinnova desarrolla diversos proyectos d einvestigación en cuatro grandes áreas: Preferencia del consumidor; Material vegetativo y manejo vitícola; Maduración y enología; y Viticultura y medio ambiente
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