Más de la mitad de la leche y productos lácteos que se venden en el Reino Unido, tendrán que importarse dentro de 20 años según los pronósticos de un informe elaborado por la láctea británica DairyCo. Allí se advierte que este será el resultado si se mantiene la actual tendencia de contracción del sector.
Durante el período 1998-2007 os precios percibidos por los ganaderos no han resultado atractivos como para atraer inversión y ampliar la explotación ni para atraer a nuevos productores. En este período, el Reino Unido ha pasado de ser un explotador neto de lácteo, con un superávit de 0,367 millones de toneladas, a ser un importador neto, con un déficit de 1,16 millones de toneladas.
Una encuesta realizada para conocer las intenciones de los ganaderos ha puesto de manifiesto que el 14% tiene previsto abandonar el sector dentro de dos aos y solo un 18% tiene intenciones de invertir en el sector para expandirse. Si los ganaderos terminan haciendo lo que muestra la encuesta, la producción de leche en el Reino Unido en la campaña 2010/11 caería a los 12,1 millones de litros. Si esta tendencia se mantuviera, en 2030, en el Reino Unido la producción sería de 7,5 millones de toneladas, lo que significaría que más del 50% de los productos lácteos que consumieran tendrían que ser importados.
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