Consumir frutas rojas ayuda a prevenir la aparición de arrugas y la inflamación producidas en la piel por la exposición a los rayos ultravioleta. Eso es al menos lo que asegura un estudio realizado por la Universidad Hallym (Corea del Sur), presentado en el encuentro Experimental Biology 2009 que se celebra en Nueva Orleans (Estados Unidos).
Así, frutas como la fresa o los arándanos resultan beneficiosas para nuestra salud por su efecto sobre la piel, sostiene este trabajo. Ello se debe a que contienen ácido elágico, un antioxidante que previene la formación de arrugas y la inflamación derivadas de la radiación ultravioleta. Este ácido también se haya en nueces y en numerosos vegetales y frutas, sobre todo en las frambuesas y granadas. ''La aplicación del ácido antioxidante elágico evitó la destrucción de colágeno y la respuesta inflamatoria a la exposición continuada a los rayos radiactivos ultravioletas que dañan la piel'', explicaron los científicos.
La investigación se llevó a cabo con 12 ratones sin pelo machos jóvenes de cuatro semanas. Durante dos meses se les expuso a una mayor radiación ultravioleta tres veces por semana. A la mitad de los ratones expuestos se les proporcionó diariamente aplicaciones tópicas de ácido elágico sobre la superficie de la piel, incluso en los días en los que no recibían la exposición ultravioleta. Estos ratones sufrieron una menor formación de arrugas que los que no recibieron tratamiento.
¡Plazo de matrículación abierto!