La jornada técnica organizada el pasado 21 de diciembre por la Agrupación Empresarial para el Fomento de la Biotecnología en la Industria de la Alimentación (AFBIA) analizó algunos de los temas que más preocupan al sector en el ámbito de la biotecnología alimentaria. Entre otros aspectos, se trataron las posibilidades que ofrece la I+D en biotecnología para la industria de la alimentación. También se abordó la importancia de la protección de las invenciones biotecnológicas a través de las patentes, así como los últimos avances en bioproducción de microalgas y microencapsulación alimentaria para el desarrollo de nuevos productos funcionales.
Tras escuchar al sector en el campo de la biotecnología aplicada a la industria de la alimentación, AFBIA ha detectado la necesidad de proteger el conocimiento y la I+D generada y su explotación industrial. Resulta importante para las empresas ''conocer los aspectos fundamentales en relación al desarrollo de las patentes y su protección jurídica en base a la directiva 98/44/CE del Parlamento Europeo de 16 de julio de 1998, que recoge la normativa para la protección de invenciones biotecnológicas'', destacó Gabriel González Limas, Jefe de Servicio de Patentes Químicas II (Biotecnología y Alimentación) del Departamento de Patentes e Información Tecnológica de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).
En cuanto a las microalgas, Mercedes Villa-Carvajal, del Departamento de Ingeniería y Procesos del centro tecnológico Ainia, señaló que son ricas en vitaminas, ácidos grasos o aminoácidos esenciales. Hasta la fecha, su uso en alimentación ha sido poco estudiado, aunque ya se ha empezado a trabajar en ellas como suplemento vitamínico, añadió. Ainia trabaja desde hace años en esta materia. En la actualidad desarrolla el proyecto INMUGAL, cuyo objetivo principal es reforzar el sistema inmune a partir de una alimentación funcional específica en base a compuestos de microalgas. La bioproducción y evaluación de la bioactividad de compuestos con acción inmunoestimuladora procedentes de microalgas serían la base para el desarrollo de nuevos formatos alimentarios de funcionalidad específica que permitan un refuerzo del sistema inmune.
Daniel Rivera, del Departamento de Ingeniería y Procesos de Ainia, abordó las últimas técnicas de microencapsulación, su uso y sus beneficios en el campo de la alimentación para la elaboración de nuevos productos funcionales y compuestos bioactivos. La microencapsulación es una técnica que mejora la conservación de los alimentos, permite combinar ingredientes incompatibles y mejorar su sabor, olor, textura, color, etc., además de aportar innumerables ventajas en el tratamiento industrial de los alimentos, apuntó al respecto.
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