Los productos lácteos envasados en porciones individuales son cada vez más populares entre los consumidores mexicanos debido a que es fácil llevarlos a cualquier lugar y son fuente de nutrientes fundamentales en la dieta diaria.
Ante la creciente demanda de estos alimentos, la Revista del Consumidor de noviembre incluyó un estudio de calidad de leches, fórmulas y productos lácteos (47 en total), contenidos en envases de 200 a 310 ml, con el objetivo de que los lectores identifiquen fácilmente la cantidad de nutrientes y el aporte calórico de cada uno de ellos.
Al considerar que se venden en porciones individuales que normalmente se ingieren como parte del almuerzo o refrigerio, la evaluación toma en cuenta las diferencias en cuanto al contenido neto de los productos.
Los resultados del análisis muestran que los lácteos saborizados son los que aportan más calorías, carbohidratos y proteínas, por lo que su consumo debe moderarse. El doctor Ismael Campos, investigador del Departamento de Transición Nutricional del Instituto Nacional de Salud Pública, recomienda a los lectores de la Revista del Consumidor que si pueden elegir el tipo de leche que van a consumir como refrigerio “es preferible que sea descremada, que no sea saborizada (porque son las que generalmente contienen más cantidad de azúcar) y que sean de, máximo, 250 ml”.
Profeco recuerda a los consumidores que, para conocer todos los detalles del estudio de calidad de leches, fórmulas y productos lácteos de 200 a 310 ml, pueden adquirir la Revista del Consumidor de noviembre, a la venta en puestos de periódicos y en locales cerrados de todo el país o en la delegación más cercana.
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