Arranca la edición de Alimentaria 2010, que se celebra por primera vez íntegramente en el recinto Gran Vía de Fira de Barcelona, y que convierte a la capital catalana en el centro internacional de operaciones para la industria, la distribución y el comercio alimentarios.
En su edición de 2010, el salón de referencia internacional pone en valor los atributos de las marcas y apuesta más que nunca por el mercado exterior como vía imprescindible para la competitividad y el futuro de la industria. Cerca de 4.000 empresas ocupan 94.500 m2 de espacio de exposición y se espera la visita de 130.000 profesionales de más una setentena de países.
El salón Alimentación Ecológica / Vegefruit reúne en 1.400 m2 del pabellón 2, los productos ecológicos junto con las elaboraciones de IV y V Gama. El sector ecológico que en nuestro país está registrando una fuerte tendencia alcista en cuanto a producción y volumen de negocio queda reflejado con la importante participación del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM).
Hay que destacar esta participación del MARM ya que acude a Alimentaria 2010 con un pabellón de grandes dimensiones, transmitiendo el liderazgo a nivel europeo de la industria de alimentos ecológicos de nuestro país. Lo cierto es que la presencia de empresas expositoras elaboradoras de productos ecológicos representará menos del 1,5% del total del espacio que alcanza Alimentaria con lo que se pierde edición tras edición una oportunidad para las empresas ecológicas españolas de aprovechar una feria que atrae a más de 130.000 profesionales de la alimentación mundial.
Así pués, Vegefruit queda integrado en el salón Alimentación Ecológica, proporcionando a todos los profesionales del salón la posibilidad de aprovechar las numerosas sinergias existentes entre estos dos sectores. Los nuevos hábitos de consumo también quedan reflejados en Vegefruit a través de los productos de IV y V Gama. Raciones monodosis, ensaladas preparadas, o frutas lavadas, peladas y troceadas han hecho recientemente una incursión muy destacada en el mercado, siendo apreciados por un consumidor que cada vez más valora especialmente aspectos como la comodidad o la rapidez a la hora de adquirir un producto.
Habrá que ver si esta integración realmente aporta sinergias al sector de la alimentación ecológica o bien es el resultado de acomodar espacios dado que los productos ecológicos son exclusivamente alimentos certificados elaborados por empresas alimentarias de cualquier índole pero certificadas. Con lo que cualquier pabellón especializado de Alimentaria debería o podría contar con la presencia de empresas del sector de la alimentación ecológica integradas en ellos.
Las administraciones y las asociaciones empresariales deberían reflexionar y ver de qué manera se puede potenciar la presencia de más empresas y contar con mayor espacio para dedicar en exclusiva a los alimentos ecológicos. Ciertamente el sector deja de aprovechar edición tras edición tener una mayor presencia y relevancia en una de las ferias más importantes de la alimentación.
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