Sólo el 30% de los consumidores españoles señala que consume alguna vez productos sostenibles, ya que a pesar de que aumenta la conciencia ecológica de los ciudadanos, todavía existen barreras como el precio más elevado de estos alimentos, la menor oferta y la dificultad par comprarlos.
Esta es una de las principales conclusiones de un estudio elaborado por Eada y la consultora IRI sobre las tendencias de consumo de estos productos verdes. El trabajo también constata que las ventas han crecido un 3,3%, hasta representar un volumen de 250 millones de euros frente a los 12.165 millones de los productos convencionales.
Los consumidores con conciencia medioambiental alcanzan ya el 80% y un 60% declara que estaría dispuesto a consumir estos productos si no existieran los impedimentos mencionados. De hecho, en el último mes, un 72% de los encuestados adquirió al menos un producto en establecimientos de comercio justo.
Más del 70% certifica que es dífícil o muy difícil identificar los productos que son respetuosos con el medio ambiente. Asimismo, más del 50% reconoce no estar dispuesto a pagar precios más altos por ellos.
Por categorías de productos, las diferencias de precios son más elevadas en el caso de la alimentación seca, con productos sostenibles que cuestan un 120% más que los convencionales, mientras que la diferencia es del 73% en las bebidas, del 41% en productos frescos y lácteos y del 51% en los ''non-food'' (no alimentarios).
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