Esta bacteria es la que contaminó los lácteos que fueron consumidos por más de un centenar de personas de las provincias de Colchagua y Cardenal Caro.
Luego de la intoxicación masiva, que provocó a más de una centenar de personas de Colchagua y Cardenal Caro cuadros de gastroenteritis leve por el consumo de quesos frescos de la Fabrica Peralillo, la seremi de Salud ordenó el análisis de los lácteos, exámenes que dieron como resultado la presencia de la bacteria estafilococo dorado.
Al respecto, el seremi de Salud, Francisco Daniels, sostuvo que “hasta ahora hemos hecho dos labores paralelas, por un lado se han realizado visitas a la fábrica, para verificar si en la planta los procesos en los que se elaboran los quesos, las condiciones de higiene y sanitarias, son las adecuadas o no, lo que hasta ahora ha dado buenos resultados, quedando pendiente saber si el pasteurizador que ellos utilizan, equipo que sirve para eliminar cualquier bacteria patógena que venga en la leche, esté funcionando de manera correcta, esto a pesar de lo nuevo del equipo”.
“Hemos obtenido en cultivos que se realizaron en los laboratorios a las muestras de los quesos, la presencia de estafilococo dorado, que es una bacteria que ha contaminado los quesos y que produce una toxina que provocó la intoxicación de estas personas”, explicó la autoridad.
Asimismo, Daniels señaló que “esta empresa es una cooperativa que funciona con un aproximado de 15 proveedores de leche, por lo que basta con que sólo un proveedor tenga la leche contaminada para que haya contaminado el resto de la leche en producción”.
En relación a las medidas que tomará la seremia de Salud para evitar una nueva intoxicación, el doctor Daniels indicó que “si bien la fábrica está con prohibición de funcionamiento desde el día 30 de octubre, por lo que generaremos dos instancias, una tiene relación a las capacitaciones a los proveedores de leche junto a los manipuladores para que sepan cuales son los procedimientos sanitarios que deben cumplir, a pesar de que alguno de ellos son asesorados por el Inda”.
Por último, “la empresa realizará una producción muy pequeña para analizar los distintos procesos de la producción, con muestras de las leches utilizadas, antes y después del proceso de pasteurizado y así detectar dónde puede haberse producido la contaminación de los lácteos, por lo que no autorizaremos una nueva venta hasta tener, por lo menos durante tres días seguidos, resultados cero”, puntualizó el seremi de Salud, Francisco Daniels.
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