El alza en los precios de los insumos, los malos hábitos alimenticios y la baja productividad promedio de las granjas nacionales han contribuido a que México mantenga un bajo consumo de leche, de 124 litros por habitante, por debajo de los 188 litros anuales recomendados por la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
En el 2005, el consumo per cápita de leche en México fue de 129 litros, el máximo registrado, y desde entonces no se ha superado los 124 litros, según datos de la Secretaría de Economía.Pero los mexicanos no sólo consumen menos leche, sino que ésta proviene cada vez más del extranjero.
“Ha habido una afectación en el consumo por efecto de la crisis y el consumo per cápita está por debajo de las recomendaciones de la FAO”, dijo Vicente Gómez Cobo, vicepresidente pecuario del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) y presidente de la Asociación Nacional de Ganaderos Lecheros AC.
En la última década, del 2000 al 2009, la producción de leche se incrementó únicamente 13.8%, menos que las importaciones de leche en polvo durante el periodo (24 por ciento).
De esa forma, México produjo 10,592 millones de litros de leche en el 2009 e importó 191 millones de toneladas de leche en polvo, que multiplicadas por un factor de entre 8.5 y 10.5 litros por kilo -según el tipo de leche- resultan en más de 1,681 millones de litros.
Gómez Cobo dijo que México requiere ordenar sus mercados con la creación de más normas y con castigos efectivos a quienes las infrinjan.
México sólo tiene una Norma Oficial Mexicana (NOM) para la leche, que es considerada por el CNA como light, por ser flexible en sus criterios para promover un mayor consumo de ese producto básico; entró en vigor otra NOM para yogures a principios de este año y se carece de otras NOM para productos lácteos como quesos y cremas.
“Muchas fórmulas lácteas tienen nombre de leche, invitan al error y las personas piensan que son iguales o incluso mejores que la leche, cuando no lo son”, agregó Gómez Cobo.
Aspectos culturales
Del gasto que los mexicanos hacen para la alimentación, el dirigido a la compra de leche y sus derivados se redujo de 13.7% en el 2000 a 12.6% en el 2008, según el INEGI.
Miembros de la Cámara Nacional de la Industria de la Leche refirieron que la FAO recomienda tomar tres vasos de leche al día a lo largo de la vida, lo cual la gran mayoría de los mexicanos no acostumbra.
Los mexicanos están además ingiriendo más leche proveniente de EU, país al que se le eliminaron los aranceles a la importación en las aduanas mexicanas desde enero del 2008.
Gómez Cobo cuestionó que el crecimiento de las importaciones está impulsado por las grandes bolsas de subsidio otorgadas por el gobierno estadounidense a sus granjeros, un motivo por el cual Canadá no incluyó al sector lácteo dentro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
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