España se ha considerado tradicionalmente un país con mucha calidad de vida, por el excelente clima, la dieta mediterránea, sus costumbres, sus hábitos de vida, etc. La calidad de vida está relacionada con factores como la alimentación y el deporte y es un objetivo para la mayoría de las personas. Por tanto, ¿cómo aprovechar esta ventaja en el lanzamiento de nuevos productos y servicios relacionados con la alimentación?
En este ámbito estamos trabajando desde consumolab realizando estudios para conocer los estilos de vida de las personas, los gustos personales y las necesidades no satisfechas y, a partir de la información obtenida, trasladarla a las empresas para que pueden enfocar su oferta de servicios y productos, tanto de alimentación como de ocio y deporte, de manera que alcancen el éxito con mayor probabilidad, en todos aquellos productos decidan lanzar al mercado.
Según el último índice de calidad de vida publicado por International living en noviembre de 2011, España ocupa la posición nº 26 dentro del ranking mundial en el que se evalúan criterios como el coste de vida, la seguridad, la salud, las infraestructuras, el clima, la libertad, la economía, la educación y la cultura. Con un porcentaje del 100% en libertad y seguridad y de más de un 90% en salud y ocio y cultura. Teniendo en cuenta estos datos estamos dentro de los 20 países europeos con mayor calidad de vida y, ciudades como Barcelona y Madrid se encuentran dentro de las 15 primeras posiciones. ¿Cómo aprovechamos esta ventaja?
Ofreciendo servicios y productos que mejoren la calidad de vida:
- Que respondan a la situación y necesidades concretas de los distintos grupos poblaciones
- Que no sólo ayuden a mejorar estéticamente sino que tengan relación directa con la salud
- Que creen una sintonía entre la edad biológica y la cronológica
- Que tengan una relación directa con el deporte y/o bienestar e inciten a realizar una actividad física
Todos estos aspectos son fundamentales y claves a la hora de desarrollar nuevos productos que nos ayuden a tener un nivel de vida saludable y a conseguir óptimas condiciones de salud y energía. En este ámbito la alimentación sana y el deporte son el secreto de la calidad de vida y ello, debe quedar reflejado en los productos y servicios que consumimos para alcanzarla, cubriendo de esta forma las necesidades de consumo determinado de alimentos que favorezcan nuestra salud y bienestar.
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