Con la compra de Santa Clara, la refresquera industrializa leche pero no la produce ni tiene socios.
En agosto de 2013, Coca-Cola tendrá lista la estrategia a cinco años de su lechera, en la que invertirá 5,000 millones de dólares (mdd) a cinco años.
“No puedo abrir demasiado las cartas. Pero si nosotros entramos a una categoría es para invertir fuerte”, declaró Brian Smith, su presidente en México.
Santa Clara es una marca que ya tiene presencia nacional, pero sólo a través del canal ‘moderno’, de supermercados, tiendas de autoservicio y de conveniencia. Allí vende yogures, crema, leche de sabores, pasteurizada y ultrapasteurizada, y queso cottage.
En el primer año, apostará por lácteos que no requieren refrigeración. Brian Smith, CEO de Coca-Cola dice que, al permitirle ensayar lanzamientos, las tiendas Santa Clara le ayudarán a definir qué, cómo y cuándo crecer, principalmente, en lácteos refrigerados.
Coca-Cola podría destinar su inversión para adecuar los espacios de refrigeración actuales en la planta, bodegas, flota y puntos de venta de Santa Clara.
También, en ese tiempo definirán si algunas líneas de productos que no son lácteos -como la miel o las galletas- se quedan o se van, explica Felipe Núñez, presidente de Jugos del Valle.
En refrigerados, la competencia no será sólo frente a las lecheras mexicanas más tradicionales, como Lala, Alpura, Zaragoza y San Marcos. En el caso de los helados, los quesos y los yogures, Coca Cola se enfrentará a firmas globales: Nestlé, Danone y Unilever.
Así, Coca Cola entra con cautela al segmento: “Entramos con una dosis de humildad para aprender a dar pasos muy grandes. Sería contraproducente pensar que solamente porque somos muy fuertes en refresco, podemos hacer lo mismo en otras categorías que no conocemos todavía”, asegura Smith.
¡Plazo de matrículación abierto!