El mercado costarricense de atún en conserva está dominado por dos empresas: Sardimar, con una cuota que ronda el 70% -y cuatro de las marcas más destacadas en el país: Sardimar, Pacífico Azul, Splash y Tesoro del Mar-; y el Grupo Calvo, que ostenta cerca del 18%.
La firma española cuenta con una planta procesadora en el Puerto de La Unión, El Salvador, desde donde concentra el 50% de su mano de obra (1.500 trabajadores, aproximadamente) y exporta a toda Centroamérica y el Caribe. El acceso al mercado tico fue uno de los motivos que impulsó la deslocalización de la producción de la conservera. Costa Rica destaca por la importancia de su núcleo de consumidores, el quinto a nivel mundial en cuanto a consumo per cápita.
Ahora, Grupo Calvo -primer productor de atún en España y quinta conservera en el plano internacional- estima en el transcurso de 2012 duplicará el crecimiento que registró en Costa Rica el año pasado (+13%). La meta para el presente ejercicio pasa por alcanzar un aumento de las ventas del 35%. Para ello, la compañía cuenta con un producto de alta calidad a buen precio y una flota pesquera propia.
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