Ingredientes para ''4 personas'':
- 600g Atún rojo
- 2 Huevos
- 1 diente Ajo
- 2 ramitas Perejil
- 1 Tomate
- 2 Cogollos de Tudela
- 2 Nabos
- Un chorrito de aceite de oliva
- 4 molletes redondos
- Sal
- Pimienta blanca
- Ketchup
Tiempo total: 60 min
Tiempo de elaboración: 40 min
Tiempo de cocción: 20 min
Epoca del año recomendada: Todo el año
Elaboración:
- Pre-elaboración:
Machacar el atún con un tenedor y mezclar con el diente de ajo picado, el perejil picado, los huevos enteros, sal y pimienta blanca. Dejar reposar al frío ½ hora.
Pelar, lavar y cortar los nabos en bastones.
Partir el tomate en rodajas y la cebolla en aros.
Separa en hojas los cogollos de lechuga. Lavar, escurrir y reservar.
Formar las hamburguesas.
Elaboración
Freír los bastoncitos de nabo en aceite caliente como si fueran patatas. Salar y reservar sobre papel absorbente.
Cocinar las hamburguesas sobre una plancha caliente con un chorrito de aceite para que no se sequen, deben quedar jugosas por dentro.
Mantener calientes.
Abrir los panes en dos mitades
Presentación
Colocar la hamburguesa sobre una mitad del pan y sobre la otra mitad una o dos hojas de lechuga, rodajas de tomate y aros de cebolla.
Decorar con Ketchup al gusto.
Servir acompañadas de los nabos fritos.
Fuente: Receta extraída del libro: Aprende a cocinar en familia. 50 recetas de la Dieta Mediterránea. Argis Congress, S.L. 2006. Autores: Fundación Dieta Mediterránea.
¿Sabías que?
Indagar en el origen de la hamburguesa resulta ciertamente un tanto complicado. Aún tratándose de una hamburguesa casera hecha a base de pescado y no de carne picada, nos resulta inevitable remitir a la forma originaria de dicha elaboración. Pues es justamente sobre la sofisticación del prototipo de la hamburguesa clásica que proponemos el plato de esta semana. Y es que realmente habría que desmitificar todas las versiones existentes que atribuyen a unos u otros la procedencia inamovible de una comida prolífica donde las haya. Aunque se identifique la hamburguesa como ícono americano, lo que ciertamente pone de manifiesto es un determinado tipo de cultura y, como no, el símbolo de la industrialización alimentaria y la globalización. Pues sería quizás la hamburguesa el máximo exponente del fast food. Pero no siempre fue así, ya que si retrocedemos en el tiempo descubrimos que en un principio su elaboración y consumo respondía más bien a los condicionantes económicos y las limitaciones de tiempo y ritmo de vida que caracterizaron a los marineros del puerto de Hamburgo por allá finales del siglo XIX. Probablemente, serían éstos los que traerían consigo la hamburguesa a los Estados Unidos. De todas formas, la historia de este famoso alimento cobra más relieve y más dudas plantea cuanto más atrás se remonta uno en el tiempo. Pues parece que su origen podría perderse entre el Mediterráneo árabe, la zona centro europea y rusa y Asia Central, donde parece que mongoles idearon una especie de bolas a base de carne para subsistir en un medio nómada. Lo que no cabe duda es que la hamburguesa, a día de hoy, proporciona un amplio abanico de posibilidades culinarias.
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