Según el International Wine & Spirits Research (IWSR), las ventas alcanzaron en Estados Unidos la cifra de 300,6 millones de cajas en 2011, lo que supuso un aumento del 4,2% respecto al ejercicio precedente, mientras que en Italia se registró una contracción del 1,2%, sumando 297,3 millones de cajas. Francia, por su parte, continuó su declive, con unas ventas de 271, 6 millones de cajas.
En EEUU, las ventas de vinos locales de baja graduación aumentaron un 5,1% (221 millones de cajas), mientras que las importaciones crecieron un 1,9% (82,1 millones de cajas). Esta fuerte demanda en el país norteamericano se ha visto compensada con los caldos locales e italianos, principalmente, aunque los vinos del ''Viejo Mundo'' también han registrado un fuerte incremento en sus ventas –España, por ejemplo, ha visto repuntar sus ventas un 8,7%-. Por el contrario, los vinos de baja graduación de Chile y Argentina han visto caer sus ventas como consecuencia de un tipo de cambio desfavorable.
Las previsiones apuntan a una mayor expansión de la demanda de vino en EEUU. El consumo per cápita aún es bajo en comparación con los países de mayor consumo vinícola -12,3 litros por año-. Los datos demográficos también son favorables, dado que más de 3,5 millones de norteamericanos alcanzan la edad permitida para consumir alcohol cada año. Las estimaciones de IWSR apuntan a que las ventas de vino de baja graduación alcanzarán los 322 millones de cajas en 2015.
¡Plazo de matrículación abierto!