Los mercados internacionales tienen un gran peso en nuestra producción y estrategia comercial.
Combinar la herencia y la tradición olivarera con la última tecnología y férreos controles de calidad, valores de producto y profesionalidad, son los ingredientes básicos para colocar a los aceites de Castillo de Canena como una de las marcas referentes en el mercado internacional. Adscrita al PIPE, programa referente en la iniciación a la exportación, de ICEX España, Exportación en Inversiones, es una empresa española con tradición olivarera desde 1870, que se ubica en un castillo familiar del siglo XVI.
En la actualidad “los mercados internacionales tienen un peso muy importante en nuestra producción y estrategia comercial”, cuenta Isabel Alameda, desde la empresa. El objetivo es “convertirnos en la referencia dentro de la categoría de aceite de oliva virgen extra en el exterior. Dese un principio hemos tenido vocación exportadora por ser un producto gourmet, pero el mercado nacional también ha reaccionado bien”.
En 2011, facturó 1.145.620 millones de euros, de los cuales el 49,2% procedía de la exportación. “Aunque este 2012 aún no lo hemos cerrados, las ventas internacionales han cobrado aún más importancia. Ahora, el mercado exterior representa un 60% en nuestra facturación, debido a la crisis económica por la que estamos pasando en España”, aseguran desde Castillo de Canena. En la actualidad exporta a 42 países, de los cuales Estados Unidos es su principal mercado, seguido de Reino Unido, Japón y el resto de la Unión Europea. “El objetivo –cuenta Isabel- es consolidarnos en estos mercados como el gran referentes premium entre los consumidores de aceites de oliva virgen extra”.
Su estrategia de mercado se basa en cinco pilares básicos: calidad de los productos; compromiso y desarrollo sostenible del planeta; validez y posicionamiento; innovación y apoyo, y servicio a socios. “Por otro lado, para el posicionamiento internacional, en Castillo de Canena nos basamos en el apoyo en los socios internacionales para diseñar una estrategia de mercado conjunta desde el principio”, concretan desde la empresa.
Respecto a las exportaciones españolas de aceite de oliva, según la Agencia para el aceite de oliva (AAO), dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, hasta el pasado mes de julio se exportaron 80.000 toneladas de este producto, lo que supone un incremento del 13% respecto al mismo periodo de 2011, donde se vendieron en el exterior 77.700 toneladas. Las cifras de ESTACOM muestran una facturación de 926.382 millones de euros, durante el primer semestre de 2012, lo que supones un ligero descenso del 0,87% respecto al mismo periodo del año anterior. Con Italia a la cabeza, le siguen Estados Unidos, Francia y Portugal como principales destinos internacionales de las ventas españolas.
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