El año 2012 ha sido, o eso esperamos, el del comienzo del repunte hacia arriba, aunque en pequeñas proporciones. Según los datos que nos facilita el OEMV, un 0,5 en hogares y en palabras del Ministro de agricultura, un 0,8 en el consumo extra doméstico. Sin embargo baja el precio y la facturación, increíblemente y en contra de los mercados del vino que subieron enormemente, pero eso, aun siendo importante, es otro cantar a analizar en otro momento. Hoy tenemos que alegrarnos porque el consumo sube.
Cuando se analizan los datos del Observatorio detalladamente vemos que el único tipo de vino que sube es el de los vinos tranquilos sin denominación de origen… Sí, sube el vino más “normal” y lo pongo entre paréntesis ya que no tiene por qué ser el de menos calidad, aunque sí suele ser el más económico. Con los tiempos que corren es lógico, hasta cierto punto, que este sea el tipo de vino que más suba. Caen los vinos con D.O. y cae el cava. Sube espectacularmente en volumen (un 8,8%) y en valor (un 14,9%) la sangría, siendo el producto que más sube entre todos los de los sectores analizados.
Datos aparte, quizá tediosos pero siempre necesarios, y volviendo a la raíz del tema: que el consumo de vinos suba en España, en plena crisis, es muy significativo y nos hace abrigar la esperanza de que conforme vayamos saliendo de ella se puede incrementar esta tendencia del consumo. No sé si seré un iluso, pero creo firmemente que en el consumo hemos tocado fondo y que ahora sólo nos queda tomar algo de impulso para ir ascendiendo.
Al margen de esto, hay que ir comentando la marcha de la cosecha. El tiempo está viniendo idóneo, las lluvias generalizadas y abundantes en toda España nos hacen descartar una sequía como la del año pasado y con poco que la primavera acompañe, la humedad necesaria para el viñedo estará solucionada. Por otro lado, el que a mediados de marzo esté helando en casi todas las regiones vitivinícolas nos asegura una brotación normal o tardía, con lo que reduce, aunque no elimina, el riesgo de heladas, ya que los días decisivos no hay quien nos los quite de peligro. Sólo nos queda esperar una brotación buena y que no tengamos enfermedades criptogámicas, para poder predecir una cosecha al menos dentro de la normalidad, cosa que no nos pasa mucho últimamente.
La marcha de los precios de los vinos a granel van a la baja, lentamente pero bajando, tanto en vinos blancos como en tintos. Y es que la reducción de exportaciones debido al incremento de precios se nota en el mercado Español.
Javier Sánchez-Migallón. Director Ediciones Albandea y El Correo del Vino.
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