Leche en polvo contaminada, aceite reciclado, verduras y frutas con residuos...
Compañías chinas de alimentos están luchando para recuperar la confianza de los consumidores, en medio de una crisis de seguridad alimentaria.
Leche en polvo contaminada, aceite reciclado, verduras y frutas con residuos de plaguicidas han sido algunos de los temas más candentes en los últimos años.
Tales productos alimentarios problemáticos han provocado gran pánico entre los consumidores chinos, así como también han impactado negativamente en las ventas de alimentos producidos en el país.
Guangdong Shantou Yili Food Corporation es una empresa que produce alimentos instantáneos como leche de soja en polvo, harina de avena y cereal para bebés. Daisy Xie, directora adjunta de la empresa, admite que la desconfianza de los consumidores por los productos alimenticios es un problema muy grande.
“La gente no tiene mucha confianza en la calidad de los productos alimenticios de la parte continental de China, especialmente de alimentos para bebés y niños. Prefieren las marcas de alimentos de Hong Kong, o países del sudeste de Asia y Europa”, explicó.
Con el fin de cambiar esta situación y aumentar sus ingresos, las empresas de alimentos en la parte continental de China han intentado todo lo posible para recuperar la confianza de los clientes.
Hu Zhengming, gerente de marketing de una empresa de alimentos ecológicos que vende raíces de loto en la provincia de Jiangsu, en el este de China, dice que el control de calidad anual y las marcas de alimentos ecológicos en los paquetes ayudan a comprobar que sus productos son de buena calidad.
“El país controla nuestros productos cada año, o de lo contrario no nos dejarían utilizar la marca ecológica de alimentos en el paquete. Si los productos no están a la altura, quitan la marca. También controlan si el permiso para usar la marca ha expirado o no. El control es muy estricto”, dijo.
A excepción de recibir el control nacional de calidad alimentaria, Daisy Xie también menciona varias medidas que adoptan para convencer a sus clientes.
“Daremos un montón de muestras gratuitas para los clientes a través de algunos distribuidores o tiendas de bebés antes de que compren nuestros productos. Después de que prueben las muestras, sabrán que la calidad de nuestros productos es alta”, explicó.
De acuerdo con Xie, cooperar con tiendas para bebés es una buena opción, ya que es difícil para las empresas de alimentos ponerse en contacto con los clientes directamente.
“El canal más directo es permitir que los vendedores en las tiendas de bebés sepan las ventajas de nuestros productos, y dejarlos que convenzan a los clientes. A veces es difícil encontrar las tiendas directamente en las ciudades alejadas. Entonces les pedimos a algunos distribuidores que las busquen por nosotros”, agregó.
Xie agregó que las compañías de alimentos también deben revisar las ventas en esas tiendas con regularidad para asegurarse de que eligieron las tiendas correctas para ayudar a promover sus productos.
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