La meta del tratamiento de la diabetes gestacional es mantener la glucemia en los niveles deseados, es decir, lo más próximos posible a los de un sujeto sano, evitando así la aparición de hipoglucemias.
Para controlar tu glucemia
Come de forma sana
- Tu médico (o tu comadrona) te ayudará a preparar un plan para comer de forma sana.
- Establece un plan sobre qué, cuánto y cuándo comer.
Haz ejercicio físico
- Consulta con tu médico (enfermero/educador) cuáles son los ejercicios más adecuados para ti.
- Hacer ejercicio, como caminar y nadar, podría ayudarte a conseguir los niveles de glucemia deseados.
Insulina (si fuera necesario)
- Alguien del equipo médico te enseñará a administrártela.
- La insulina no dañará al bebé; no puede pasar de tu sangre a la suya.
Niveles deseados de glucemia
Para medir la glucemia tu misma, debes saber:
- Cómo usar el medidor.
- Cómo pincharte el dedo para obtener una gota de sangre.
- Cuáles son tus niveles deseados de glucemia.
- Cuándo hacerte la prueba de glucemia.
Tal vez tengas que hacerte la prueba de glucemia en varios momentos durante el día:
- Al levantarte.
- Justo antes de las comidas.
- 1 hora después del desayuno.
- 1 hora después del almuerzo.
- 1 hora después de la cena.
- Antes de acostarte
Niveles deseados de glucemia para la mayoría de mujeres con diabetes gestacional
El objetivo sería conseguir unos niveles similares a los de una gestante sin diabetes, teniendo en cuenta que hay que evitar las hipoglucemias. Por lo general, se recomienda:
- Al levantarte: menor de 95 mg/dl.
- 1 hora después de una comida: menor de 140 mg/dl.
- 2 horas después de una comida: menor de 120 mg/dl.
¡Plazo de matrículación abierto!