Los frutos secos son alimentos muy calóricos.
¿Cómo han ido las vacaciones? Muchos de vosotros ya habréis vuelto al trabajo y necesitaréis energía para afrontar estos primeros días de vuelta a la rutina. Es por ello que hoy vamos a hablaros de un alimento muy nutritivo y fácil de introducir en vuestra alimentación diaria: los frutos secos.
Los frutos secos como almendras, nueces, avellanas o pistachos, entre otros, son alimentos muy saludables que nos aportan una buena dosis de proteínas (unos 20g por cada 100g de alimento) y de minerales (magnesio, potasio, zinc, hierro, fósforo o calcio). Además, nos aportan vitamina E, vitaminas del grupo B y grasas saludables como el ácido oleico, que también encontramos en el aceite de oliva, y grasas poliinsaturadas como el omega 6 y omega 3. Son, por tanto, un alimento recomendado dentro de una alimentación equilibrada y variada.
De hecho, podéis tomar una ración de frutos secos entre 3 y 7 veces a la semana. Así que, ya sabéis, ¡a comer frutos secos, incluso a diario!
¿Os apetece conocer cómo podemos incluirlos en nuestro día a día de manera fácil y original? Pues continuad leyendo que ya llega, aunque antes me gustaría hacer una pequeña aclaración sobre las temidas calorías de los frutos secos. Cierto es que los frutos secos son alimentos muy calóricos (debido a su alto contenido graso), pero cabe decir que una ración de frutos secos crudos o tostados (unos 25 gramos) nos aportan unas 120 Kcal, casi lo mismo que nos aporta una manzana grande (de 200 gramos). Por tanto, ya veis que si tomamos la cantidad de frutos secos recomendada (25 gramos) y elegimos versiones más ligeras de los mismos como son los frutos secos crudos o tostados, en vez de fritos o caramelizados, no tenemos que preocuparnos por nuestro peso.
Ahora sí, vamos a ver maneras fáciles y originales de tomar frutos secos:
En ensaladas: ¿habéis probado añadir un puñado de frutos secos por encima de vuestras ensaladas? Seguro que sí, pero, ¿qué os parece añadir frutos secos picados a vuestra vinagreta? Aquí os dejo una receta que me encanta: Ensalada variada con beicon, pasas y Vitalinea Pro.
Con verduras: quedan deliciosos con verduras salteadas. Saltead unas verduritas y añadid vuestros frutos secos preferidos. A mí me encanta poner pistachos, dan un toque diferente y original. Esta receta de tortitas de calabacín con pesto de avellanas está buenísima, ¿os apetece probarla?
En purés: como adorno final al servir el puré o crema, sea de lo que sea (verduras, marisco…), nunca está de más una cucharadita de frutos secos picados…. ¡ya me contaréis si lo probáis! Os recomiendo esta receta: Crema de setas y avellanas con vieiras.
En panes: ¿hacéis vuestro propio pan en casa? ¿Os gustaría probarlo? Os recomiendo pan integral de espelta y centeno con frutos secos y semillas.
Con carnes: seguro que conocéis muchas recetas de carne que incorporan frutos secos. A mí, por ejemplo, me encanta el pollo con ciruelas y piñones que hace mi madre… ¡ummm! Pero hay muchas más recetas, aquí os dejo una receta de pollo con frutos secos al yoghourt.
En los postres: tanto en repostería (pasteles, galletas, bizcochos) como en postres diversos (sorbetes, helados, cremas dulces, etc.) los frutos secos quedan geniales. ¿Qué os parecen estas recetas? Coca de yoghourt Danone, Yolado relleno de frutos secos y leche condensada, Mouse de yoghourt Griego Danone con dulce de boniato, crujiente de avellana, frambuesas y frutos secos, y flan de turrón. ¡Qué buenas!
Hasta aquí hemos llegado hoy. Espero que os gusten las recetas e ideas para incluir los frutos secos en vuestra dieta diaria. Y recordad, lo mejor es tomarlos crudos o tostados y no olvidéis que una ración de frutos secos son unos 25 gramos. Esto son unas 18-20 almendras /avellanas o unas 4-5 nueces. ¿No está mal, verdad?
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