La industria de las botanas también se está adecuando para fabricar productos con menos calorías.
Mientras que el sector formal de las botanas presenta una caída de 15 a 20 % en sus ventas al primer semestre del año, en contra parte, la informalidad en este sector creció 30 %, aún y con el riesgo que esto puede representar para el consumidor.
El expresidente nacional de la Rama de Fabricantes de Botanas de Canacintra, Andrés Del Bosque Prieto, señaló que en los últimos años el ataque a la industria de las botanas ha sido muy severo; sólo con la aplicación del IEPS este año, su precio aumentó 8 %.
Las restricciones en las escuelas y publicidad, así como por la lentitud que existe en la economía, es lo que generó la caída en las ventas el primer semestre del año.
“Las botanas son productos de consumo inmediato, de impulso y el esfuerzo publicitario es muy importante, entonces sí, ya de hecho, había una serie de regulaciones que la misma industria había promovido hace varios años, esto no viene más que a cerrar un poco más la posibilidad de anunciarse con más apertura y ahora habrá una serie de limitaciones en cuanto a horarios infantiles”, indicó Del Bosque Prieto.
Del crecimiento del sector botanero informal añadió que también se da porque la gente ya no tiene la posibilidad de comprar una botana tan fácilmente.
No obstante, Del Bosque Prieto aseguró que la industria de las botanas no se está dando por vencida, ni se está cruzando de brazos, sino que está creciendo en inversiones y se están adecuando las líneas de producción para fabricar productos con menos contenidos calóricos que se adapten más a los lineamientos y a las regulaciones que se han establecido.
Entre ellos están no sólo las botanas, sino también la industria refresquera que anunció inversiones en México por mil millones de dólares.
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